Mi maldita vida}

ElComienzoDelFinal}

Ornella se peinaba sus maravillosos cabellos color rojo ardiente, que con el sol, daba unos espectaculares reflejos color dorado. Había quedado con unos compañeros de clase para hacer un trabajo en el instituto. El cielo parecían un gran abismo negro excepto por algunas nubes de un color un poco más claro, que avecinaban tormenta. Hacía frío, bastante frío. Se abrigó con una chaqueta de cuero rojo y salió a la calle. Su casa estaba a pocos metros de su escuela. 


Entró al instituto y un escalofrío le recorrió la columna vertebral, no le dio importancia, supuso que sería por el cambio tan brusco de temperatura. Dentro hacía una temperatura muy agradable. Las luces estaban apagadas y casi no se podía ver por donde pisaba uno. La pelirroja había quedado con sus compañeros en su clase, que estaba al subir las escaleras.

-A ver si no me mato subiendo.-Se dijo a sí misma en voz alta. Se centró en los escalones para no dar un traspiés. 


Y abrió la puerta de la clase, allí estaban sus compañeros de trabajo, bueno, todos excepto uno. Zayn, un chico nuevo, de América. Saludó a los chicos con un gesto de cabeza, no se llevaba muy bien con ese grupo. Otra vez, la excepción era Zayn, tenía algo en los ojos, un halo de misterio y tristeza en ellos, a Ornella le volvían loca, además de ser muy atractivo no era como los demás chicos, sino que era tímido.

-¿No creéis que el instituto da mucho miedo así?.- Tania rompió el silencio reinante en la sala.

-Pues sí, me da escalofríos.-Respondió Ornella.

-Tranquila, Nella, yo te protegeré de cualquier peligro.-Le dijo con un tono pícaro un chico rubio. El típico prototipo nazi. Ángel era su nombre, aunque de ángel no tenía nada. Se acercó un poco a la pelirroja.

-No seas subnormal, Ángel, ¿qué peligro podría haber aquí?.-Zayn apareció derepente irrumpiendo en la sala, al parecer, había estado escuchando toda la conversación. Tenía algo diferente, no sabía que era, pero algo en él había cambiado…y, al parecer, no a mejor. Mientras iba a sentarse, no quitaba la vista de Ornella, ésta se incomodó y apartó la vista.

Nota.: Hola, espero que os guste el primer capitulo.